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jueves, 29 de septiembre de 2011

Internacionales – ¿Pymes sin balances?

De acuerdo a una nota publicada en el sitio web Cincodias.com la Comisión Europea estudia introducir la posibilidad para las microempresas de quedar exentas de la obligación de presentar sus estados contables en el Registro Mercantil.

Pero al hablar de microempresas “debe desterrarse de la mente la imagen de un empresario modesto, con pocos trabajadores a su cargo y cuya suerte incide poco en la evolución de la economía nacional. Sucede más bien lo contrario, las microempresas son compañías que cumplen al menos dos de estas tres condiciones: tener menos de 10 empleados durante gran parte del año, facturar menos de un millón de euros o registrar un balance con una cuantía inferior a los 500.000 euros.”

En la Europa Comunitaria se presenta una situación muy similar a nuestro país, ya que el 85% de las empresas europeas cumplen estos supuestos y, en el caso español, entre el 75% y el 90% de las compañías poseen dos de estas características.

Las compañías, empresarios, entidades financieras, asesorías contables, consultoras y asociaciones de representación que resultarían afectadas por esta disposición normativa están manteniendo un vivo debate sobre las ventajas y los inconvenientes de esta decisión.

Dentro de las ventajas se encuentra que la exención de presentar sus cuentas ante el Registro Mercantil podría suponer un ahorro de 6.300 millones de euros anuales. Otras razones en favor de la medida es reducir las cargas administrativas que deben afrontar estas empresas, con el objetivo de que dirijan la mayor parte de sus recursos a sus actividades productivas.

Sin embargo, algunos expertos consideran las microempresas se verían obligadas a ofrecer esa información a otros agentes del mercado que la reclaman, como entidades financieras, autoridades fiscales o acreedores. "La conclusión más robusta del estudio es que realmente la exención legal no va eximir a las microentidades de la necesidad de tener que generar esta información para estar en el mercado", subraya el responsable de comunicación de Crédito y Caución, Pavel Gómez. En este sentido, dice que, en caso de que la medida fuera aprobada, solo un 8% de los encuestados se conformaría con los datos aportados por la compañía sobre su situación financiera y el porcentaje restante optaría por exigir más información complementaria a la microempresa que se hubiera acogido a la exención y, por tanto, no hubiera presentado cuentas.

Otro de los debates que se genera es que de querer bajar la carga administrativa a las pequeñas empresas se debería reducir la carga de información requerida por el fisco u otros organismos de contralor, situación que en Argentina también conocemos en profundidad.

En este sentido el director general de la consultora Improven, Eduardo Navarro indica que "En España tenemos muchos más problemas con las relaciones entre la empresa y la Administración. La presentación de cuentas no es de los más relevantes".

En cualquier caso, los expertos consideran que el mercado no puede funcionar sin información. "Es inevitable en un mundo globalizado jugar con esas reglas. Cuando se va a cerrar un acuerdo comercial con otra compañía, se trabaja normalmente a crédito. Hay un riesgo evidente de no cobrar. Por eso, es inevitable que haya unos niveles de información necesarios", afirma Gómez.

Es interesante analizar estas versiones en función del impacto que podría tener en nuestro país una medida similar, y es conocido el papel que juegan los estados contables en muchas pequeñas empresas en nuestro país, o sea ser un mero canal para la confección de las declaraciones juradas impositivas en lugar de aprovecharlos como la valiosa herramienta de gestión que pueden ser.