Un
fideicomiso que está supervisando la quiebra de Taylor, Bean & Whitaker
Mortgage (TBW) y una de sus subsidiarias presentaron una demanda ante un
tribunal de Florida contra la firma contable y de consultoría más grande del
mundo reclamando pérdidas combinadas de 7.600 millones de dólares (5.630
millones de euros).
Deloitte
"certificó que TBW era una compañía solvente, viable, con precisos
estados financieros cada año desde el 2001 hasta 2008", señala una de
las demandas presentadas.
"A
pesar de la acreditación y experiencia de Deloitte como una de las 4 Grandes
empresas contables, esas declaraciones y las otras imágenes optimistas
que proporcionó de TBW eran completamente falsas", agrega la demanda.
Por su
parte el portavoz de Deloitte, Jonathan Gandal, dijo que "las
reclamaciones son totalmente infundadas".
No es la
única acusación de este tipo, pero sí la más reciente de una serie de demandas
que han golpeado a las principales firmas contables por su papel en la
crisis de crédito.
Pricewaterhouse
Coopers, KPMG y Ernst & Young también enfrentan acusaciones respecto a sus
estándares de auditoría por parte de inversores que buscan colectivamente recuperar
miles de millones de dólares que perdieron en la crisis financiera.
Fuente: eleconomista.es