De acuerdo a un estudio de la consultora KPMG, la mayoría de los fraudes que
ocurren en empresas se da en las tesorerías, en donde “el efectivo es más fácil de robar”, y en las
compras, debido a la colusión entre los empleados y proveedores.
Estos datos fueron obtenidos de la Encuesta de Fraude en México 2010 presentada
por la consultora KPMG. En dicho informe se asegura que la incidencia de los
fraudes por malversación o robo de activos (en tesorerías) y los fraudes con
proveedores suman 64% del total.
En cuanto a los daños económicos atribuibles a cada tipo de fraude se señaló
que los mayores daños se relacionan con información financiera falsa o
manipulada. Lo anterior representa 70% del total atribuible a los seis principales
fraudes que se realizan: malversación (robo) de activos, fraudes relacionados
con compras, fraudes relacionados con ventas, información financiera falsa o
manipulada, fraude relacionado con marcas o patentes de la compañía y fraude
cibernético.
Además, según la investigación, en muchos casos el modus operandi consiste
en transferencias electrónicas de efectivo hechas directamente de la cuenta
bancaria de la compañía a la de un empleado. En estos casos generalmente la
administración no se da cuenta de la situación hasta después de un periodo
promedio de 6 meses.
Otras veces existen cheques emitidos al mismo beneficiario varias veces,
cheques que se emiten “a nosotros mismos” y que son cambiados por efectivo.
También, explica KPMG, cuando hay pagos en efectivo, éste puede ser
malversado. Al respecto, el informe indica que “cuando hay una caja general o
incluso cajas chicas, se intercambia la comodidad por el control, y hemos visto
casos donde se deposita el monto de la caja chica a un empleado en su cuenta
personal”.
La forma que KPMG descubrió en que se comenten estos ilícitos es la
siguiente: la existencia de empleados dentro del departamento de Finanzas que
pueden hacer transferencias electrónicas desde su computadora sin que haya una segunda
firma que las autorice. También mediante conciliaciones bancarias que no son
revisadas con el detalle necesario. De esa forma, las salidas de efectivo no se
documentan y no se autorizan conforme a las políticas de la empresa “debido a
la urgencia”.
Fuente: Altonivel.com.mx